Seguimos con nuestra sección de entrevista a autores para que puedas conocer más sobre ellos y su trayectoria literaria. En el día de hoy te dejamos una entrevista con Gloria Julia Martín Barredo, autora de Atrás queda la luz. Continuar Leyendo
7 criterios para acertar al elegir editorial
¿Estás considerando la opción de autopublicar un libro?. Estás de enhorabuena. Hoy te damos unos consejos sobre cuáles son los servicios mínimos que tiene que darte una editorial para que estés tranquil@ al firmar tu contrato de edición. ¿Quieres conocer los 7 criterios para acertar al elegir editorial para publicar un libro? ¡Apunta!
Di NO a las editoriales que publiquen cualquier obra
Huye de editoriales que editen todo tipo de manuscritos. Esto es una señal de que el libro no será leído por nadie y trabajarán más como un servicio de imprenta que de editorial. Será sencillo darte cuenta. Simplemente te dirán que puedes publicar y unas tarifas, sin que te manden un informe de lectura. Sin que te den un motivo de porqué tu obra ha sido aceptada por ellos.
Si no te mandan un primer informe de lectura, no es de fiar
Busca editoriales que hagan una primera lectura de tu obra. A día de hoy, todo el mundo puede autopublicar. Si lo que buscas es estar en las mejores librerías, tienes que encontrar una editorial con servicio de lectura (o informe de lectura) ya que, en este momento, necesitas consejos de mejora o refuerzo de cosas a resaltar. Al principio será un proceso que tarde más, pues habrá alguien que lea tu obra, pero a la larga lo agradecerás. Son muchas las librerías que rechazan libros por no cumplir un mínimo de calidad.
Corrección obligatoria
La corrección debe ser obligatoria e incluida, es decir, si te dicen que si contratas X ejemplares o hasta X páginas la corrección es gratuita, ya podrás imaginar que no todos los libros que han editado han cumplido esas características, con lo que tenemos que tener claro que sea una línea editorial profesional, para que después nuestro libro, el que nos ha costado tanto trabajo y que con tanto cariño hemos tratado, no sea rechazado por los lectores.
Corrección sin coste adicional
Debemos encontrar una editorial que se encargue de hacer las correcciones ortotipográficas, de estilo e integrales. Esto quiere decir que por mucho cuidado que hayamos tenido escribiendo, si no somos filólogos, siempre se nos podrá escapar algo. Por ello debemos entregar la obra a una editorial que cuente con este tipo de servicios sin un cargo adicional.
Gestión de tramitación legal
Llegados aquí es importante que gestionen la tramitación legal, al menos el depósito e ISBN, para que tu libro, con su código asociado, pueda ser encontrado en cualquier punto de venta.
Maquetación y diseño profesional
Es importante que sea una editorial que cuide al detalle la maquetación y diseño de la cubierta de forma profesional. La estética del interior y exterior son muy importantes. Tienes que entender que cuanto más atractivos sean los ejemplares, más lectores se acercarán a tu obra.
Editorial y editor, unidos por un mismo fin
Por último, y no menos importante, es fundamental encontrar una editorial que te de un servicio durante la edición y después de ella. Debéis tener en común el éxito de la obra. La editorial y tú debéis ser un equipo para que el libro llegue al máximo de lectores, para ello es bueno que te promocionen en redes sociales, prensa, presentaciones…
Si has ido respondiendo que sí a todos los servicios, ¡por fin puedes elegir editorial para publicar un libro! Has encontrado una editorial de confianza, con la que podrás firmar tu contrato con total tranquilidad.
Esperamos que te hayan sido de utilidad estas sugerencias antes de decantarte por una editorial, pues en gran medida, de esto dependerá el éxito de tu novela. Y tú, ¿Nos sugerirías algún servicio más?
Entrevista a Manuel Ortega «El Zorro», autor de Los pasos de la juventud
En el día de hoy inauguramos una nueva sección en nuestra web. Será una sección de entrevistas con los autores de Azur Grupo Editorial. Comenzamos la sección con esta entrevista a Manuel Ortega «El Zorro», autor de Los pasos de la juventud que, próximamente, estará a vuestra disposición en las librerías.
Entrevista a Manuel Ortega
¿Dónde nació tu afán por escribir?
Todo empieza con la afición a la música y a la poesía, ya que creo que son, como poco, primas hermanas (literatura y música) en esta familia tan amplia de apellidos Arte y Cultura. Creo que fue al escuchar Larga Vida al Rock & Roll, de Barón Rojo, en aquellos maravillosos años 80 en los que yo quería escribir letras como aquellas que me hacían (y me hacen) vibrar al ritmo de guitarras, bajo y batería. Curioso es que escuchaba esta (mi primera) cinta-casete en un aparato de un tío mío que, 20 años más tarde, me dejaría de herencia 800 libros. También, de lo que más me gusta, aun sabiendo que se puede experimentar cualquier sensación a través de la lectura, es el poder denunciar las injusticias o al menos mostrarme en contra de ellas. A ello me enseñaron El diario de Ana Frank, El niño yuntero, Yo te nombro libertad, Muere lentamente o A galopar, entre otras.
¿Cómo fue el proceso de creación y experiencia editorial?
En realidad, me ha pillado en pleno proceso, pero hasta ahora está siendo positivo. He dado con profesionales que me están ayudando y enseñando mucho. Y, sobre todo, están teniendo una enorme paciencia, ya que no es solo que sea nuevo en esto, sino que no tengo ni idea de programas con los que debo escribir y otros contratiempos que, como digo, me están solucionado desde la editorial.
¿Qué intentas reflejar con el título?
El título, Los Pasos de La Juventud, está muy claro lo que quiere reflejar: los pasos de la juventud, que es de lo que hablo en su interior, de los caminos que recorremos por la vida. Y pese a que tengo bien claro que cada persona camina por su vereda, también sé que hay puntos y cruces en los que nos encontramos unas con otras personas, ya que compartimos ese espacio y tiempo en el que nos cruzamos. ¿Hasta cuándo somos jóvenes? Yo creo que es una pregunta muy común y de amplia respuesta.
¿Cómo definirías tu obra?
Según para quién, no para todo el mundo igual. Depende de su capacidad intelectual y cultural, por supuesto. La definiría, sobre todo como fresca, muy entretenida, con su pizca de suspense, intriga, musical, rebelde… con su triple ración de erotismo y de sexualidad, bastante informativa, y un poco educativa.
¿A quién va dirigido Los Pasos de la Juventud?
Por su contenido sexual, si le hacemos caso a la ley, seguramente debería de ser para mayores de 18. De hecho, el libro lleva este símbolo, pero yo creo que a partir de los 16 ya pueden leerlo. Las primeras escenas se desarrollan en una clase de 3º ESO y, aparte de este punto legal, yo creo que Los Pasos de La Juventud le aportaría algo positivo a cualquier persona, independientemente de su edad y otros atributos.
¿Darías alguna recomendación a nuevos escritores?
No me gusta dar consejos, pero a mí, los que me han dado mucha gente relacionado con este mundillo, van enfocados a que si quiero escribir, antes tengo que leer. Y por supuesto que hasta que la obra no esté a la altura de la situación, que no la editaré.
Esperamos que os haya gustado. Próximamente nuevas entrevistas con autores.
¿Por qué es fundamental una corrección ortotipográfica y de estilo en tus obras?
¿Por qué es fundamental que tu obra la valore y corrija un profesional? ¿Qué pueden aportar a tu obra una corrección ortotipográfica y de estilo? ¿Y una corrección integral? Si te apetece saberlo te animamos a seguir leyendo.
¿Has escrito una obra que parece tener sentido y quieres compartirla? ¡Enhorabuena!, has hecho el trabajo más difícil, eres ESCRITOR.
Creemos que escribir es tener una idea, madurarla y desarrollarla. Si en este momento sigues pensando en publicar, te va a llevar unos meses si quieres hacerlo bien.
Afirmamos, como profesionales del mundo editorial, que es totalmente necesaria una valoración y corrección como parte del proceso, y te explicamos por qué.
3 consejos antes de editar tu obra
Nuestro primer consejo es que des tu obra a un pequeño número de personas para que la lean por gusto y puedan hacer críticas que sepas encajar de forma constructiva. Es decir, a todos nos gusta recibir halagos, pero si no nos dicen las cosas a mejorar, este punto sirve de muy poco o nada. Para ello debemos ser conscientes que todos tenemos algún punto a mejorar. No olvidemos que nuestro objetivo es que nuestro escrito guste al público.
En este paso, y con las mejoras realizadas, es el momento de enviar tu obra a un equipo de profesionales que la puedan VALORAR. Es importante que en la editorial con la que vayas a trabajar te hagan una primera lectura con personas cualificadas en la materia. En el informe que te remitan debería constar algo importante para ti, como pueden ser las características de tu obra, estructura, puntos fuertes y débiles a mejorar, sugerencias de corrección, calidad objetiva del texto, opinión profesional del escrito… No olvides que este paso es de vital importancia, y es aquí donde un experto debe ayudarte para que tu obra sea publicable.
Te encuentras en el momento donde debes escoger siempre hacer una corrección de tu obra. No, no queremos decir que tengas faltas de ortografía, pero si no eres filólogo, este es un buen momento para dejar tu manuscrito en manos de uno. Este trabajo podría ser realizado por otras personas, ahorrarían trabajo al corrector profesional, pero nunca lo sustituirán. Esta persona dejará tu obra acabada para que cualquier librería pueda aceptar tu libro, de modo que no lo rechacen por no verlo terminado de forma profesional.
La corrección y sus niveles
Corrección ortotipográfica
La corrección ortotipográfica es absolutamente necesaria e imprescindible. Por definición, si eres escritor, deberías tener cero faltas de ortografía, pero a todos se nos puede escapar alguna. Por ello es imprescindible este tipo de corrección.
Mejoras que persigue la corrección ortotipográfica:
o Fijar la ortografía a las normas que establece la Real Academia Española. Tildes, abreviaturas, símbolos, guiones de diálogos, etc.
o Detectar y corregir los errores ortográficos que pueda tener el manuscrito.
o Unificar criterios o “estandarizar” el texto en aquellas cuestiones que escapan a la normativa vigente, como el mal uso de cursivas -itálicas-, el entrecomillados o negritas.
o Se detectan páginas huérfanas, palabras viudas, repetición de palabras o sílabas, sistema de márgenes, saltos de línea, tipo de letra, foliación, etc.
o Revisión del sumario y su correspondencia con la obra.
Corrección de estilo (o corrección estilográfica)
Cada autor tiene su propio estilo, marcado principalmente por su educación, nivel sociocultural y su procedencia. Sin embargo, el estilo no siempre lo va a marcar el autor, y pulirlo nunca está de más.
Mejoras que persigue la corrección de estilo:
o Deshacer ambigüedades involuntarias.
o Reformular oraciones confusas o erróneas en un lenguaje claro y estructurado.
o Reparar lagunas oracionales en busca de una mayor precisión.
o Ajustar las concordancias.
o Garantizar que cada término cumple correctamente su función gramatical en la frase.
o Estructurar las oraciones mediante una correcta puntuación.
o Reparar errores léxicos.
o Eliminar repeticiones, redundancias y cacofonías.
o Ajustar la puntuación de cara a conseguir una mayor precisión discursiva.
o Todo aquello que contribuya a embellecer y armonizar el texto.
Corrección integral
Es una revisión que busca redondear la obra de tal forma que no quede ningún punto flaco en ella. Para ello, hay que buscar las partes que puedan sobrar o faltar, y afianzar las que funcionen mejor, con el fin de que el libro dé lo mejor de sí.
Se revisan los temas más profundos de la obra.
Mejoras que persigue la corrección integral:
o Problemas estructurales.
o Diálogos.
o Personajes.
o Escenario.
o Mensajes…
Recuerda que corregir es de sabios y que la interacción no está reñida con ser un buen escritor. Esperemos te hayan sido útiles estos consejos y explicaciones sobre la valoración, corrección ortotipográfica y de estilo, corrección integral y por qué es fundamental hacerla siempre con profesionales. Y a ti, ¿Cuál es el error más grave que te han detectado?
¿Cómo debe ser la estructura de los diálogos de una obra?
Diálogos y estructura
Muchos escritores tenéis dudas sobre el uso de los guiones de diálogo en su estructura, la función de estos es la de indicar lo que dicen los personajes de un texto, y separar lo hablado por uno de ellos de lo que añade el autor de forma explicativa.
Si escuchamos una conversación e intentamos llevarla al papel, nos damos cuenta de que ese diálogo no funciona a nivel narrativo. Las conversaciones están llenas de interrupciones, frases sin terminar… Los diálogos pueden adoptar formas y convenciones muy distintas según el tipo de obra. Conocerlos bien nos ayudará para elegir cuál nos conviene emplear
Diálogos con y sin acotaciones
Los diálogos pueden incluir diálogos con acotaciones del narrador, cuando es así, se dice que son abiertos, cuando son sin acotaciones, se dice que son cerrados.
En este caso se utiliza la raya aportando información al lector sobre la acción o tonalidad del personaje que habla, dejamos unos ejemplos para apreciar mejor la diferencia;
—Hola, ha llegado Andrea —dijo Javi. Diálogo con acotaciones (abierto) del narrador.
—Andrea, tengo ya coche; ¿y tú? Diálogo sin acotaciones (cerrado) del narrador.
Raya y guión
Es uno de los fallos más frecuentes a la hora de escribir un diálogo. La diferencia entre la raya y el guión es sencilla, el guión (-) es más corto que la raya (—). La forma correcta de escribir los diálogos es con raya;
—Andrea, llama a Pablo.
La raya se debe usar durante todo el diálogo, incluidas las acotaciones del narrador:
—Hola, me llamo Pablo -dijo él. Incorrecto.
—Hola, me llamo Pablo —dijo él. Correcto.
Así que, en todos los diálogos hay que usar raya, nunca guión.
Espaciado
- Usar el espaciado en los diálogos es otro de los fallos más frecuentes, simplemente hay que recordar que no hay espaciado entre la raya y la primera letra del diálogo:
—Mi hermano se llama Jonathan. Correcto.
— Mi hermano se llama Jonathan. Incorrecto.
- No hay espaciado tampoco en la acotaciones del narrador, pero si entre la última palabra del diálogo y la acotación.
—Mi hermano se llama Jonathan —dijo Rosa. Correcto.
—Mi hermano se llama Jonathan — dijo Rosa. Incorrecto.
- No hay espaciado al final de la acotación, pero sí que hay al comenzar de nuevo el diálogo.
—Mi Hermano se llama Jonathan —dijo Rosa— y tiene cinco años. Correcto.
—Mi hermano se llama Jonathan —dijo Rosa — y tiene cinco años. Incorrecto.
Los diálogos son parte fundamental de cualquier historia, por lo que es imprescindible para todos tener claro su estructura, estos no son los únicos diálogos y pueden hacerse combinaciones a partir de estos, así como nuevas formas. Lo importante es que el texto fluya y que el lector sepa quién está hablando en cada momento. A partir de ahí, depende del ingenio y pericia del que escribe.
Esperamos que estos consejos sobre cómo debe ser la estructura de los diálogos de una obra os hayan servido y los llevéis a la práctica.